El gobierno interino de Egipto anunció hoy que está estudiando prohibir los Hermanos Musulmanes, un día después de que al menos 173 personas murieran en las manifestaciones del llamado viernes de la ira.

Por su parte, fuerzas de seguridad egipcias arrestaron al clérigo Safwat Hegazy, acérrimo seguidor del derrocado presidente Mohamed Mursi, así como a seis miembros de los Hermanos Musulmanes en El Cairo, informó una fuente de seguridad. Hegazy enfrenta cargos por incitar al asesinato y a la violencia.

Sin embargo, el Ministerio del Interior se negó a confirmar o negar el arresto.

Además, fiscales egipcios se encuentran interrogando a 250 seguidores de Mursi bajo cargos de asesinato, intento de asesinato y terrorismo, informó hoy la televisión estatal. Los islamistas fueron arrestados el viernes pasado en la céntrica Plaza Ramsés y la comisaría cercana, mientras intentaban tomarla por asalto. Asimismo son investigados por presuntamente incendiar edificios de la zona.

La propuesta de ilegalizar el movimiento islamista fue realizada por el primer ministro de transición, Hazem al Beblawi, afirmó ante la prensa un portavoz del Ejecutivo.

PROHIBIDOS CON HOSNI MUBARAK Los Hermanos Musulmanes estuvieron prohibidos durante el gobierno del derrocado Hosni Mubarak, aunque estuvieron representados en ocasiones en el Parlamento mediante candidatos independientes. El partido que fundaron tras la Primavera Árabe, Libertad y Justicia, fue la fuerza más votada en las primeras elecciones parlamentarias de la era pos-Mubarak. Su candidato a los comicios presidenciales, Mohamed Mursi, fue elegido para el cargo en 2012 pero el Ejército lo depuso a principios de julio pasado.

El gobierno reconoció además hoy la muerte de 173 civiles durante la jornada de manifestaciones que se vivió ayer, viernes de la ira, lo que eleva a más de 750 el número oficial de víctimas mortales desde el miércoles, entre ellas 57 policías.

Durante el viernes de la ira resultaron heridas unas 1.330 personas, según los servicios sanitarios, y la policía aseguró haber realizado más de mil arrestos, sobre todo de seguidores de los Hermanos Musulmanes.