Tomás Unger Golsztyn

Al concluir la 26 Conferencia de las Partes sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP26), hubo poco entusiasmo por el acuerdo al que llegaron los países. El objetivo era acordar medidas que impidan un aumento por encima de 1,5 °C en la temperatura promedio del planeta –con respecto a los niveles preindustriales– antes del 2100. Esto era una concesión, ya que solo un grado por encima del promedio anual representaría extremos de temperaturas y eventos climáticos peligrosos.