Reunión entre los campesinos desplazados y la Dirección de Titulación de Tierras del Gobierno Regional de Junín fue el 20 de setiembre.
Reunión entre los campesinos desplazados y la Dirección de Titulación de Tierras del Gobierno Regional de Junín fue el 20 de setiembre.
Enrique Vera

Representantes de algunas de las comunidades de Vizcatán del Ene (Junín), que han sido desplazadas por el terrorismo en el último año, se reunieron el pasado viernes 20 de setiembre con la Dirección Regional de Agricultura (DRA) Junín para exponer la situación de violencia en sus tierras y gestionar la emisión de títulos de propiedad.

Para los delegados de los centros poblados Alto Mantaro, Unión Fortaleza y Señor de Luren, correspondientes a la zona más convulsa del valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), este ha sido un nuevo intento a fin de que los inspectores de la DRA Junín ingresen a esos sectores para verificar los terrenos y sus límites.

Los comuneros desplazados de aquellos pueblos informaron a El Comercio que el personal responsable de la DRA Junín hasta ahora no ha podido ingresar a la zona por la presencia de columnas armadas de la organización terrorista Sendero Luminoso.

Desde inicios del año pasado, Alto Mantaro es una de las zonas de Vizcatán del Ene tomadas por la subversión. Ahí, los dirigentes vecinales Dionisio Huayanay y Elvis Sayme Curo, quienes se opusieron a las incursiones senderistas, fueron torturados y desaparecidos. Tras el desplazamiento de varias familias, ese pueblo quedó habitado por colaboradores del grupo terrorista.

El delegado de los desplazados de Alto Mantaro indicó que al dominio del terrorismo en el pueblo se ha sumado ahora la expansión de la comunidad nativa Meantari, adscrita a la Central Asháninka del Río Ene (CARE).

Esta misma situación es la que hoy estaría afectando al centro poblado Señor de Luren. El teniente gobernador de este sector, Abraham Taguada, sostuvo que 30 familias se desplazaron en agosto pasado luego de que 14 campesinos fueran retenidos y agredidos durante toda una noche por un grupo de nativos y subversivos. Abraham Taguada subrayó que la zona que ocupaban desde el 2007, y que había sido reconocida como centro poblado desde el 2013, ahora es parte de la comunidad Meantari.

Sin embargo, la representante legal de la CARE, Irupé Cañari, manifestó a este Diario que Meantari no es una comunidad en expansión sino que ha recuperado sus derechos sobre los territorios ancestrales que le corresponden. Meantari fue reconocida como comunidad nativa en febrero del 2017 por el Gobierno Regional de Junín. Cañari indicó que en ese mismo mes un grupo de colonos, dedicado a la tala y tráfico de madera en la zona que pertenecía a Meantari, expulsó a los asháninkas amenazándolos de muerte. La abogada refirió que estos colonos armados estaban agrupados en lo que denominaban Asociación de Productores Agroforestales Señor de Luren. Dos meses después, los asháninkas pudieron recuperar el espacio a través de su comité de autodefensa, pero desde entonces el conflicto ha quedado instalado en la zona.

Según se denunció en la reunión, Meantari también tiene una disputa de terrenos con la comunidad nativa Otishi. El director de Titulación de Tierras y Catastro Rural de la DRA Junín, Eli Jeremías Sánchez, remarcó que en el plano de titulación de la comunidad Meantari existían superposiciones sobre la comunidad de Otishi, y los centros poblados Alto Mantaro y Señor de Luren.

—Denuncia—

Todos estos detalles fueron presentados durante la sesión que estuvo presidida por Eli Jeremías Sánchez.

En otro momento, el representante de Unión Fortaleza, lugar del cual 25 familias salieron tras la invasión, secuestro y sometimiento de campesinos, denunció que entre los asistentes estaba uno de los sujetos que, presuntamente, habían encabezado esas embestidas.

Se trataba de Hugo Soras Tello, quien, según los comuneros, se mantuvo en silencio y después abandonó la reunión. Ante la fiscalía y el Juzgado de Paz de Vizcatán del Ene, Soras ha sido acusado de dirigir un grupo armado que el pasado 11 de enero mantuvo cautivos por varias horas a 19 campesinos de Unión Fortaleza. Algunos de los comuneros secuestrados narraron a este Diario que luego fueron obligados a firmar un acta en que entregaban sus tierras. También, que en una cita posterior con ‘Fernando’, mando de Sendero en esa parte del Vraem, se les comunicó que el nombre de su pueblo iba a ser cambiado por Nuevo Amanecer-Alto Vizcatán.

Precisamente, en el acta correspondiente a la reunión de comuneros con la DRA Junín, Hugo Soras firma como único representante de Alto Vizcatán.

Eli Jeremías dijo a este Diario que para el 25 de octubre se ha programado una visita de inspección a las comunidades de Alto Mantaro, Señor de Luren y Otishi, en coordinación con la Defensoría del Pueblo; sin embargo, ello dependerá de la autorización del comando político militar a cargo de la zona.


SITIOS EN ALERTA:

  • Las superposiciones entre cuatro comunidades de Vizcatán del Ene y la amenaza terrorista son los principales problemas en ese sector del Vraem. La DRA Junín acopiará documentación para verificar las propiedades de las tierras hasta el 18 de octubre.
  • Entre enero y junio los campesinos del caserío Unión Fortaleza fueron hostigados por una columna armada de Sendero Luminoso. Más de 25 familias huyeron de ese pueblo.

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