El exsoldado Daniel Abed Khalife, de 21 años, se encontraba preso a la espera de un juicio por acusaciones de dejar bombas falsas en una base militar.
El exsoldado Daniel Abed Khalife, de 21 años, se encontraba preso a la espera de un juicio por acusaciones de dejar bombas falsas en una base militar.
/ POLICÍA BRITÁNICA
Renzo Giner Vásquez

El miércoles 6 por la mañana, un exsoldado acusado de logró escapar de una disfrazándose de cocinero y amarrándose a la parte baja de una camioneta que había llegado a la penitenciaría para dejar suministros de alimentos.

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La fuga, más propia de una película de acción que de la vida real, fue protagonizada por Daniel Abed Khalife, joven de 21 años que se encontraba preso a la espera de un juicio por acusaciones de dejar bombas falsas en una base militar y otros cargos relacionados con la Ley de Secretos Oficiales.

En respuesta, el Secretario de Justicia, Alex Chalk, ordenó la búsqueda a nivel nacional que incluye controles de seguridad adicionales en los principales aeropuertos y puertos del Reino Unido, incluidos Manchester, Gatwick, Heathrow y Dover, detalló Sky News.

La situación, sin embargo, es considerada un auténtico escándalo por la oposición, que comenzó a cuestionar por qué un preso como Khalife fue enviado a una prisión de seguridad media y no a una de vigilancia extrema, considerando que enfrenta cargos por terrorismo.

Khalife se habría fugado atado a la parte baja de un vehículo que llegó a la prisión para dejar suministros de comida.
Khalife se habría fugado atado a la parte baja de un vehículo que llegó a la prisión para dejar suministros de comida.
/ JUSTIN TALLIS / AFP

¿Quién es Daniel Abed Khalife y de qué se le acusa?

Un joven delgado, de 188 centímetros de altura, cabello castaño corto y 21 años. Así describen las autoridades a Khalife. En el 2018 se enroló como ingeniero de redes informáticas en el Royal Corps of Signals, el brazo de comunicaciones del Ejército Británico.

Como parte de dicho cuerpo, Khalife estaba destacado en Beacon Barracks, una base desde donde se brinda información y comunicaciones a las sedes de las brigadas blindadas y el enlace satelital para comunicarse de regreso al Reino Unido, y el 22º Regimiento de Señales, que sirve al Cuartel General del Cuerpo de Reacción Rápida Aliado de la OTAN, según Sky News.

Su papel en el cuerpo militar no generó alarma hasta enero del 2022, cuando fue detenido por un delito que las autoridades no han especificado pero por el que rápidamente lo dejaron en libertad bajo fianza. Poco después, sin embargo, Khalife volvió a ser arrestado, esta vez por orden del Comando de Contraterrorismo de Scotland Yard.

Las investigaciones en su contra señalan que Khalife habría estado involucrado en una amenaza de bomba que tuvo lugar en su base. Según las autoridades, el joven colocó “tres cilindros con cables” en un escritorio en su alojamiento del Ministerio de Defensa.

De acuerdo a la acusación fiscal, Khalife desapareció de las barracas después de la supuesta amenaza de bomba y fue encontrado semanas después “en o cerca de su automóvil”.

Además, se lo acusa de obtener o intentar obtener información que podría ser útil para un terrorista el 2 de agosto de 2021 y de violar la Ley de Secretos Oficiales al recopilar información que podría ser útil para un enemigo entre el 1 de mayo de 2019 y el 6 de enero de 2022, según el medio británico The Standard.

Los cargos penales en su contra llevaron a que Khalife fuese dado de baja el 22 de mayo.

Khalife fue recluido en la prisión de seguridad media HMP Wandsworth.
Khalife fue recluido en la prisión de seguridad media HMP Wandsworth.
/ JUSTIN TALLIS / AFP

Un escape de película

Inicialmente, el joven fue enviado a la prisión de máxima seguridad HMP Belmarsh en Thamesmead, pero por alguna razón se ordenó posteriormente su traslado a la cárcel HMP Wandsworth, un reclusorio de seguridad media ubicada al sur de Londres.

Khalife, quien a fines de julio había comparecido ante la justicia y negado los cargos, se encontraba a la espera de su juicio que debía comenzar el 13 de noviembre en Woolwich.

Durante su detención, el joven fue enviado a trabajar en las cocinas de Wandsworth. El miércoles último se encontraba cumpliendo con su jornada en dicha posición cuando una camioneta de reparto de suministros llegó.

El automóvil ingresó a la prisión a las 7:32 de la mañana. Unos 18 minutos más tarde Khalife fue reportado como fugado. La prisión fue cerrada de inmediato y el vehículo, que según Sky News pertenecería a la empresa Bidfood, fue detenido por la policía a las 8:37 a.m. cerca de la intersección de Upper Richmond Road y Carlton Road, a 37 kilómetros de la prisión.

El ministro Chalk fue el encargado de detallar en la Cámara de los Comunes la huida de Khalife. En dicha sesión, además, confirmó que el joven había utilizado correas para fijarse a la parte baja del vehículo, según la evidencia encontrada.

La última vez que fue visto, Khalife vestía un polo blanco, pantalones de cuadros rojos y blancos, y unas botas marrones con punta de acero, según la Policía Metropolitana. Las autoridades sospechan que Khalife podría estar en contacto con personas en Kingston, al suroeste de Londres, o en el noroeste de Inglaterra.

Sin embargo, la búsqueda ordenada por el Gobierno Británico se extiende por todo el país. Por otro lado, el exdetective de Scotland Yard Peter Bleksley dijo a Sky News que el fugitivo podría estar buscando ayuda médica por posibles quemaduras sufridas al aferrarse a la parte baja del vehículo.

Ante esto, Bleksley instó a las farmacias y hospitales a mantenerse alerta. Hasta el cierre de este artículo las autoridades británicas no han sido informadas sobre avistamientos de Khalife.

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