La Primera Dama de los Estados Unidos, Jill Biden, con Hunter Biden y Ashley Biden. (Foto de Brendan Smialowski / AFP)
La Primera Dama de los Estados Unidos, Jill Biden, con Hunter Biden y Ashley Biden. (Foto de Brendan Smialowski / AFP)
/ BRENDAN SMIALOWSKI
Agencia EFE

El fiscal que lidera la investigación contra, hijo del presidente de EE.UU.,, afirmó este martes que la investigación continúa, pese a que se llegó a un acuerdo de culpabilidad contra el imputado.

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En un breve comunicado, publicado por la cadena CNN, el fiscal David Weiss indicó que las pesquisas siguen “en marcha”, sin ofrecer más detalles.

Weiss hizo esta aclaración poco después de que el abogado de Hunter Biden, el letrado Christopher Clark, indicara que tenía el “entendimiento” de que la indagación del Departamento de Justicia estaba “resuelta”.

Hunter Biden fue imputado de posesión ilegal de un arma y por presentar y pagar tarde sus declaraciones de impuestos en 2017 y 2018, según un escrito judicial dado a conocer este martes.

De acuerdo al documento presentado hoy por Weiss, fiscal de Delaware (EE.UU.), ante una corte federal, Hunter Biden aceptó un pacto con la Fiscalía para declararse culpable de dos cargos relacionados con los impuestos.

En virtud del acuerdo de culpabilidad, Hunter Biden, de 53 años, admite no haber declarado al fisco los ingresos que recibió en 2017 y 2018, y no haber pagado por ellos, a cambio de que los fiscales recomienden la libertad condicional para él, con lo que podría evitar entrar en la cárcel.

El arreglo también incluye lo que en el argot judicial de EE.UU. se denomina “desvío previo al juicio” en lo que se refiere al cargo de posesión ilegal de un arma de fuego. Ese mecanismo sirve para esquivar un enjuiciamiento tradicional y que el acusado pase a un programa de supervisión comunitaria.

Si un juez federal acepta el acuerdo, esto podría suponer el fin de la investigación a Hunter Biden, que ha salpicado a su padre, cuyos rivales políticos han utilizado estas pesquisas para arrojar dudas sobre los negocios del hijo del mandatario en el extranjero y para describir a la familia de presidente como corrupta.

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Esta investigación se abrió en 2018 durante el mandato del expresidente Donald Trump (2017-2021) y ha sido utilizada por los republicanos desde 2020 para atacar al presidente demócrata, al que acusan de no haber hecho ningún esfuerzo para llevar esta indagación hasta el final.

De hecho este martes, Trump y el líder de los republicanos en el Congreso, Kevin McCarthy, arremetieron contra Biden por las acusaciones contra su hijo.

“¡Guau! el DOJ (siglas en inglés de Departamento de Justicia) del corrupto Biden acaba de terminar con cientos de años de responsabilidad penal concediendo a Hunter Biden una mera ‘multa de tráfico’. ¡Nuestro sistema está ROTO!, dijo Trump en su red social, Truth Social.

Desde la Casa Blanca, un portavoz se limitó a señalar en un comunicado que “el presidente y la primera dama aman a su hijo y lo apoyan mientras sigue intentando reconstruir su vida”.

Al frente de la investigación del Departamento de Justicia, está Weiss, designado por Trump como fiscal federal en Delaware y con décadas de experiencia.

Fue confirmado por el Senado de EE.UU. en 2018 para servir como fiscal de EE.UU. para el Distrito de Delaware y, cuando la Casa Blanca de Trump anunció su nominación junto a otros fiscales, indicó que compartía su visión para “hacer EE.UU. seguro de nuevo”.

La investigación a Hunter Biden por parte de Weiss se ha extendido hasta el mandato de Joe Biden, lo que hizo que el marzo pasado durante una comparecencia ante el Senado el fiscal general de EE.UU., Merrick Garland, asegurara que no iba a interferir con la investigación.

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