Enrique Planas

Su infancia transcurrió en el barrio de Chacra Ríos, al lado del coliseo Amauta, en plena crisis. Era 1988 y recuerda a su mamá haciendo maletas. Viajarían a reunirse con su padre, que había llegado meses atrás a Nueva York, buscando el futuro que la hiperinflación les negaba. Ella tenía 8 años y no sabía inglés. Han pasado 35 años, y frente al Central Park, en uno de los pasillos circulares del emblemático edificio que acoge al museo Guggenheim de Nueva York, su curadora de arte latinoamericano, la peruana Geaninne Gutiérrez-Guimarães, recuerda y se conmueve.